Sanidad FeSP-UGT Informa que se ha detectado un error en el Anexo II de la convocatoria de Celador/a publicada hoy, viernes 15 de marzo, y en las de Auxiliar Administrativo publicadas el día anterior. INGESA comunica que procederán a subsanarlo a la mayor brevedad posible en una nueva resolución del BOE.
Hoy, 15 de marzo, se ha publicado:
Plazo de solicitud: hasta el 12 de abril de 2019
Plazo de solicitud: hasta el 12 de abril de 2019
Plazo de solicitud: hasta el 12 de abril de 2019
Plazo de solicitud: hasta el 12 de abril de 2019
Plazo de solicitud: hasta el 12 de abril de 2019
Y si quieres más información sobre las diferentes convocatorias nacionales, entra en la web de FeSP-UGT, Trabajar en lo público.
Transcurrida una década desde la entrada en vigor de la Ley 39/2006, de 14 de diciembre, de Promoción de la Autonomía Personal y atención a las personas en situación de dependencia (LAD) la materialización del derecho subjetivo a las prestaciones que instaura dicha Ley se ha articulado a través de una cartera de servicios personales y de atención desempeñada mayoritariamente por mujeres. Desde la Secretaría de Igualdad de la Federación de Servicios Públicos de UGT en colaboración con la Sª del Sector de Salud, Sociosanitario y Dependencia FeSP UGT y en coordinación con la Vicesecretaria de UGT . Se consideró conveniente conocer en este momento las características estructurales de esa fuerza laboral femenina y las condiciones de trabajo de las mujeres que desarrollan el último y más moderno de los servicios públicos de nuestro sistema de bienestar.
La ayuda a domicilio es una de las prestaciones principales de la Ley de Dependencia y, en términos cualitativos, es una de las más deseables, por cuanto responde a dos factores de calidad relevantes: (1) se presta en el entorno de la persona beneficiaria de la prestación, en el propio hogar, mientras la persona puede recibir en el hogar los cuidados; (2) constituye un cuidado formal cuando se dispensa como prestación del SAAD: se lleva a cabo por profesionales que acreditan una cualificación para proporcionar la atención requerida por el beneficiario. Las tareas que integran esta prestación de ayuda a domicilio son las que determinan los servicios sociales, y son de dos tipos: apoyar a los usuarios en actividades básicas relacionadas con el cuidado de su propio cuerpo y otras destinadas a favorecer su desenvolvimiento en el entorno.
Es la situación laboral de estas personas, mujeres en su inmensa mayoría, la que nos ha ocupado en la presente investigación. Las auxiliares de ayuda a domicilio prestan sus servicios en empresas concesionarias de los ayuntamientos -Administración pública que tiene la competencia de la ayuda a domicilio- y una minoría son trabajadoras municipales cuando está municipalizado el servicio. Su situación laboral viene determinada en los respectivos convenios laborales. Sus demandas a menudo se trasladan a los medios de comunicación: versan sobre condiciones salariales y del tiempo de trabajo, sobre el retraso en el pago de salarios por parte de las empresas en las que prestan servicios, sobre la estabilidad laboral y, en algunos casos, sobre la reducción del número de horas en sus contratos.
La Vicesecretaria General de UGT, Cristina Antoñanzas, ha alertado sobre la situación de los trabajadores y trabajadoras que realizan tareas de ayuda a domicilio, a través de empresas concesionarias de los ayuntamientos, y ha advertido que este sector se está convirtiendo en “un nicho para las grandes empresas multiservicios que licitan a la baja y que han empeorado el servicio de atención y las condiciones laborales”. En este sentido, ha hecho un llamamiento a las Administraciones Públicas, porque “son ellas las que contratan”.
Este sector está altamente feminizado, “son mayoritariamente mujeres las que ejecutan las políticas públicas de cuidado y las que se encargan dentro de las familias”, y sólo una minoría son trabajadoras municipales.
Asimismo, ha denunciado que los recortes unilaterales del Gobierno del PP a la Ley de Dependencia, “han convertido un sistema de derechos, en proceso de desarrollo, en un sistema asistencialista”. En este sentido, ha señalado que “se ha debilitado la intensidad de la acción protectora del sistema, disminuyendo el número de horas de ayuda a domicilio, o la cuantía de las prestaciones económicas, o retrasando el momento de percepción de prestaciones económicas reconocidas”.
Antoñanzas ha hecho estas declaraciones durante la presentación del estudio de la Federación de Empleados y Empleadas de los Servicios Públicos de UGT (FesP-UGT) “El trabajo de ayuda a domicilio en España”. Un acto en el que han intervenido, también, Luz Martínez Ten, Secretaria de Mujer y Políticas Sociales de esta Federación, Luis Manuel Monforte Pérez, responsable de Salud, Servicios Sociosanitarios y Dependencia de la FeSP-UGT Castilla La Mancha y las autoras del estudio, Pepa Franco y Blanca Ruiz.
Clica sobre la imagen para acceder al Informe...
Convocadas hoy, en Ceuta y en Melilla, la oferta de empleo público para DUEs, Auxiliares de Enfermería y Auxiliares Administrativos. Clica para acceder al BOE correspondiente:
Auxiliares de Enfermería (30 en Ceuta, 24 en Melilla)
Auxiliares Administrativos (5 en Ceuta, 7 en Melilla)
DUEs (16 en Ceuta, 26 en Melilla)
La FeSP-UGT denuncia que el sistema utilizado por la Gerencia del Hospital Universitario para la citas y registro de revisiones en las Consultas Externas es un sistema muy deficiente e ineficaz, fuente de continuos problemas, que afecta principalmente a nuestro personal administrativo de Citas Previas, a las Consultas Externas y además tiene repercusiones negativas para los pacientes por los muchos errores que se cometen al utilizar tan pésimo sistema.
Es inconcebible que en la época tan tecnológica en que nos hallamos y con el ingente presupuesto en equipos informáticos, aplicaciones, licencias, etc., que destina el INGESA al Hospital Universitario, las listas de revisiones de pacientes de las consultas externas se confeccionen como se hacía hace 40 años, a papel y bolígrafo en las consultas por el personal de enfermería, anotándose los datos de los paciente en folios o agendas y en un segundo acto, por el personal administrativo de citas previas,incluyendo esos mismos datos en el programa informático de citas. Y hay veces en que las agendas se cierran sin más, quedando el paciente en el limbo. Recordamos al director de gestión que ésto no es legal.
El mismo trabajo dos veces, en un proceso arcaico, confuso y complicado por la frecuente mala calidad de las fotocopias entregadas al personal de citas previas y los también frecuentes errores tipográficos (lógicos en la toma manual de datos) y que afectan a detalles de identificación de los pacientes (nombres, NIF, número de historia clínica, etc.), deficiencias que convierten diariamente el trabajo de los administrativos (escasos y sobrecargados de trabajo) en labores complejas de investigación, llamadas frecuentes a las consultas para resolver dudas, acceso a otras aplicaciones de usuarios, etc., para poder confeccionar y retornar en las mejores condiciones las listas mecanizadas con sus etiquetas identificativas (de las que hablaremos después) a las respectivas consultas de especialidades
médicas, un sinfín de problemas a los que hay que añadir también las listas que por diversos motivos no llegan frecuentemente en tiempo y forma a Citas Previas y obligan a los administrativos a realizar auténticas carreras contra reloj para que las consultas puedan comenzar su actividad diaria y no se causen perjuicios a los pacientes.
Tan deficiente organización que hasta en ocasiones crea fricciones entre el personal sanitario de las consultas y los administrativos de citas previas, no siendo ninguno de ellos los culpables de este descontrol. Los únicos responsables son los directivos del INGESA que no hacen nada por buscar soluciones a estos problemas.
Un verdadero caos organizativo, pues no existe un único canal definido para la entrega a citas previas de las listas de pacientes, las cuales llegan por diversos medios, entrega manual, tubos neumáticos, comunicaciones telefónicas, recogida en consultas externas, etc. Desorganización que llega a veces al extremo de mecanizarse listados de consultas a un mes vista o más y darse el caso de no haberse recibido los del día de la consulta de los días más próximos a la fecha, teniendo que reclamarse los mismos al personal de enfermería o a su responsable.
Esta mala organización, que como ya se ha explicado, la sufren en primer lugar nuestros propios trabajadores, personal sanitario y no sanitario, afecta también a los pacientes, puesto que por mucho celo que el personal ponga en hacer bien su trabajo, en muchas ocasiones no es posible incluir a pacientes y etiquetas en sus respectivas listas, hecho que obliga a diario a la consulta a comunicar telefónicamente los datos del paciente a citas previas para incluirlo en el programa informático y que el médico pueda aperturar su historia clínica, como asimismo enviarles las etiquetas identificativas. Estas gestiones llevan consigo a que en muchos casos el paciente citado tenga que soportar esperas indebidas por nuestra deficiente organización, creándoles confusión y malestar contra nuestro personal en las consultas.
La forma en que se confeccionan y distribuyen estas etiquetas identificativas no está determinada por ningún patrón, puesto que por cada paciente se incluye una tirada de ellas, con independencia de que se precisen o no, con lo cual todas las etiquetas sobrantes (demasiadas) van todas a la máquina de destrucción de documentos, otro trabajo en parte estéril y como se suele decir “dinero tirado a la basura”. No es entendible que el director de gestión, que se caracteriza por su inacción, no haya puesto en marcha otro sistema más fidedigno, ágil, digitalizado y por supuesto más barato que el actual y en beneficio del paciente
Estas cuestiones son sobradamente conocidas por los gestores del hospital, pero año tras año y lejos de darle una solución, no hacen absolutamente nada, ni por los trabajadores, ni por los usuarios, que en definitiva son los destinatarios de la función pública a que nos debemos.
Por todo lo expuesto, desde la FeSP-UGT de Ceuta, exigimos a la Gerencia del Hospital como responsable del buen funcionamiento de los servicios, que aparte de ampliar la dotación del personal administrativo de estas unidades y no endosarles nuevos trabajos como se viene haciendo (registro de nacimientos, agenda de llamadas para las carpetas, continuas reprogramaciones de consultas suspendidas, etc.), organice debidamente un nuevo sistema de trabajo que garantice su buen funcionamiento, eliminen la duplicidad y el despilfarro, alivie la presión de nuestro personal y mejore la atención a los pacientes.
Antonio José Ponce Gutiérrez
Representante Sanidad FeSP-UGT Ceuta
Comunicado de Prensa