El acuerdo de marzo de 2017 abrió la puerta de la negociación para la reversión de las medidas impuestas durante la crisis. En sanidad, el acuerdo de marzo de 2017 detiene la destrucción del empleo con tasas de reposición del 100% y reduce la temporalidad.
Casi un año después, con la firma del acuerdo de 9 de marzo de 2018 se inicia un tímida recuperación de la creación de empleo neto en el ámbito de la sanidad. Aquellas Comunidades que hayan cumplido la regla de gasto, el objetivo del déficit y el de deuda pública podrán llegar en las tasas de reposición de efectivos hasta el 108%; quienes no hayan cumplido se quedaran en un 105%.
Además, el acuerdo incorpora al ámbito sanitario la investigación, la salud pública y la inspección médica. Para estos ámbitos el plazo de realización del objetivo de disminuir la temporalidad se amplía durante el 2020.
En cuanto a la recuperación de derechos, el nuevo acuerdo amplía la capacidad de negociación con las CCAA:
En cuanto a la jornada laboral, si bien continuará establecida en 37.5 horas, se podrán negociar calendarios laborales, y otras jornadas ordinarias en atención a las características de cada ámbito sectorial y actividad, o su distribución.
En cuanto a medidas que permitan la conciliación de la vida familiar y profesional, se podrá negociar la acumulación de un 5% de la jornada anual (con carácter recuperable) para el cuidado de familiares. Además será posible negociar el establecimiento de una jornada continua especial cuando se tiene a cargo menores y discapacitados.
En cuanto a la incapacidad temporal: se puede negociar restituir el cobro del 100% en la IT en las retribuciones siempre que se justifique la ausencia con una baja médica. Otra posibilidad es negociar el establecimiento de catálogos de contingencias (“establecer distintos escenarios retributivos en función de la contingencia”)
Otro de los logros de este acuerdo es la creación de grupos de trabajo para la formación, para jubilación parcial y para la igualdad.
Finalmente en materia salarial este acuerdo asegura una subida fija del 6´1% en 3 años, con la posibilidad muy factible si la economía continua en los actuales parámetros de alcanzar el 8´79% en 2020.
El acuerdo firmado el 9 de marzo continua con la estela del acuerdo firmado en marzo del 2017 en tres lineas fundamentales:
- Detener la pérdida de empleo que se manifiesta con las tasas de reposición por encima del 100%, 108% o 105% dependiendo del cumplimiento o no de los parámetros económicos.
- Recuperación de derechos perdidos, en cuanto a jornada e IT, va un poco más con medidas para la conciliación de la vida laboral y familiar, y crea unos grupos de trabajo para la formación, para medidas de igualdad y jubilación parcial.
- Recuperación de poder adquisitivo asegura una subida fija hasta el 2020 del 6,1, que podría llegar al 8,79% en un escenario de máximos, en función del PIB.